3 sept 2023

Año Hídrico 2023-2024

Recuerdo que las últimas veces que escribí del tiempo el año pasado lo hacía esperanzado porque pensaba que a Sánchez le quedaba poco tiempo. Por memoria histórica de la de verdad, llevo sosteniendo en conversaciones varias que este próximo año hídrico sería rico y copioso; y que, después de tanta carestía, seguramente volveríamos a ver inundaciones en el área de Jerez y del sur de la provincia de Cádiz. Confiaba en que la recuperación del nivel de los embalses, así como los múltiples beneficios que trae consigo un buen nivel de precipitaciones beneficiarían a la economía y al nuevo presidente, que relevaría al nefasto Sánchez, auxiliado por una buena coyuntura meteorológica. 

Sin embargo, todo parece indicar que será una vez más el actual presidente en funciones quien saque provecho de una meteorología que, según muchos especialistas, será favorable para la agricultura y el abastecimiento humano. 

El año hídrico finalizó prácticamente en la primera semana de enero; apenas se registraron lluvias en los siguientes seis meses, produciéndose esa inmisericorde y severa sequía, sólo aliviada por la abundancia de las precipitaciones otoñales.

El calendario de lluvias actual se ha inaugurado este fin de semana, recogiéndose en San José del Valle, y en sólo dos días, más del 30% de todo lo acumulado en el anterior 2022-2023. Es significativo este pluviómetro porque es el que está más relacionado con lo que pueda afectar al gran pulmón hídrico de nuestra provincia, que no es, como mucha gente sigue creyendo, el pantano de Los Hurones, sino el embalse de Guadalcacín. Los pluviómetros que nutren al primero, más relacionados con El Bosque y Grazalema, no han alcanzado cifras tan tremendas como la localidad del valle.


En fin, esto no ha hecho más que empezar y pinta bien. 

Por lo demás, la primavera fue normal; con momentos de bastante calor que coincidieron con la Feria de Abril y que hicieron saltar las alarmas de los habituales benefactores de la humanidad, acallados luego cuando los registros térmicos se situaban en cotas normales hasta la llegada del verano; verano que también ha sido normal, con momentos de fresco, tanto diurno como nocturno y las habituales oleadas de calor reflejadas en esos mapas mefistofélicos con los que acompañan la información meteorológica los informativos de nuestro país, también benefactores de la humanidad y de la Creación.

Ah, recuerden que para el frío hay que esperar hasta, aproximadamente, el 15 de noviembre. Una cosa es lluvia y otra cosa es frío, que ya somos mayorcitos para distinguirlo.